La obra está conformada por tres pinturas en las que se utiliza el autorretrato para reflexionar sobre la realidad social y la
escalada de violencia en México.
Se centra en la pintura de en medio, que separa la vida y la muerte, al presentar ocho opciones probables de causas de muerte actuales a través de la
propia imagen del artista, en un formulario que hace alusión a lo también burocrático de los decesos. Las cuatro primeras opciones son las más frecuentes,
en tanto que las otras opciones han aumentado en los últimos años, siendo cada vez más comunes, cotidianas e intrínsecas a la realidad social. Mientras
que el ultimo recuadro deja abierta esa posibilidad de lo azaroso e impredecible de la muerte.
Cabe destacar que es una obra inconclusa, que sólo podrá ser finalizada al morir la propia artista y poder terminar la pintura con los datos faltantes.
- Título: Autorretratos de esta azarosa realidad
- Materiales: Cascaras de naranjas, acuarela, tinta china, madera y herrajes.
- Técnica: Pintura en acuarela y tinta china
- Medidas: 87 x 46 cm.
- Años de producción: 2019